La propuesta, defendida por la diputada de Esquerra Republicana (ERC) Gemma Calvet, ha salido adelante con el apoyo de todos los grupos del Parlamento a excepción del Partido Popular de Cataluña (PPC).
El texto aprobado dicta la regulación de las asociaciones cannábicas desde una perspectiva de salud pública y de políticas de reducción de daños.
Asimismo la moción se opone a la supresión de los programas sustitutos de multas por consumo, declarando necesario abordar el consumo de drogas desde la perspectiva sanitaria de los consumidores, con especial atención a los más jóvenes.
Esta iniciativa es una respuesta a la Ley de Seguridad Ciudadana proyectada por el PP a nivel estatal, cuyo contenido prevé la supresión de estos programas que son una opción para sustituir a las sanciones administrativas.
Los dos puntos referidos al cannabis, de un total de 7 que formaban la moción, han sido apoyados en el debate por el conjunto de fuerzas del Parlamento con la única excepción del PP, quien ha manifestado que en su partido "no están por la legalización del porro".
La votación final ha resultado en 113 votos a favor y 19 en contra del PPC. Una vez aprobada la moción, la Comisión de Salud del Parlamento trabajará durante los próximos cuatro meses en la elaboración de una propuesta concreta para que finalmente la Generalitat apruebe una ley que regule la actividad de las asociaciones.